La élite santacrucera mostró su concepción del mundo y de la vida de sus residencias. Mientras que en el resto de la isla la irrupción del eclecticismo y del modernismo fue algo concretado, solo en elgún edificio, en la capital, se asiste a todo un plan de reforma urbana, que ha llegado a nuestros días a pesar de sus sangrías y modificaciones de años posteriores, en que la destrucción de algunas de sus obras y los añadidos de poco gusto han desfigurado alguno de sus sectores más emblemáticos como el barrio de los Hoteles. Se puede decir que solo es posible contemplar esas confluencias tipológicas y esa exuberancia ornamental, en las Canarias Occidentales, en esta ciudad. Una combinación de eclecticismo, modernismo e historicismo que, sin ser genuina, si presenta su sello particular. |