La ermita de Nuestra Señora de Regla, ubicada en las cercanías de la costa de la ciudad de Santa Cruz, fue eregida por el Cabildo a mediados del siglo XVII, en 1643. Se trata de una edificación religiosa construida con el objeto de servir de lugar de culto a la guarnición del recién levantado en sus cercanías, castillo de San Juan. El templo es el último vestigio del desaparecido barrio de Los Llanos. Dedicada a Nuestra Señora de Guadalupe en sus inicios, su festividad, el 8 de septiembre, históricamente fue muy popular en Santa cruz, a pesar de su posición algo apartada del centro urbano. Junto con las ermitas de San Telmo y San Sebastián son las tres únicas que han sobrevivido en la geografía urbana. La imagen que la preside, actualmente conocida como Nuestra Señora de Regla, de gran devoción entre mareantes y emigrantes indianos, por el peligro de ruina que presenta el pequeño templo se custodia hoy en San Telmo, se trata de la talla de la Virgen de Guadalupe, de color moreno, es una imagen de candelero para vestir. Debido al color de su piel es popularmente conocida con el apodo de "La Morenita Santacrucera".
Como nota importante, cabe destacar su función, durante la gran epidemia de principios del siglo XIX, como lugar de entierro de víctimas que perecían en la ciudad hasta la construcción del Cementerio capitalino de San Rafael y San Roque; además de depósito de las guarniciones e incluso de hospital de campaña durante los diferentes ataques que sufrió la villa a lo largo de los años.
Ha sido ampliamente reformada a lo largo de los años, presentando hoy un aspecto muy diferente al original, quedado a un nivel más bajo que las vías que la circundan. Este "encajonamiento", le resta prestancia y la hace pasar más desapercibida de lo deseable.
Actualmente se encuentra muy deteriorada, por lo que lleva varios años cerrada al público por motivos de seguridad .
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